Estudio reciente: ¿Consumir THC podría elevar las probabilidades de formar falsos recuerdos?

Por DiosaVerde.org

  • El descubrimiento podría tener importantes implicaciones legales.

Una nueva investigación publicada en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences sugiere que consumir tetrahidrocannabinol (THC), el compuesto psicoactivo del cannabis, provoca que las personas estén más predispuestas a formar recuerdos falsos.

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La autora principal, Lilian Kloft, quien es doctora de la Facultad de Psicología y Neurociencia de la Universidad de Maastricht, en los Países Bajos, y sus colegas, se propusieron investigar los efectos del consumo de cannabis en la formación de la memoria.

Esta no es la primera evidencia de que el cannabis podría afectar la memoria. Estudios anteriores han demostrado que la “exposición aguda y crónica al cannabis” perjudica la memoria verbal, el aprendizaje y la atención.

El impacto del cannabis en la memoria, explican los investigadores, es un tema particularmente importante que ha atraído mucho interés, incluso desde una perspectiva legal. Especialmente considerando que la conclusión de muchos conflictos legales depende de los testimonios y recuerdos de testigos presenciales. Sin embargo… a veces estos recuerdos podrían ser falsos.

Maleabilidad de la memoria

La “maleabilidad” de la memoria se refiere al hecho de que somos capaces de crear recuerdos de eventos que no tuvieron lugar, alterar detalles de experiencias pasadas e incluso plantar recuerdos completamente falsos en otras personas. Si bien esto podría sugerir que fumar marihuana deforma tu memoria y genera un daño cognitivo lo suficientemente grave como para que tú mismo o los tribunales pongan en duda la veracidad de tus recuerdos, esto también les sucede a los no consumidores.

De acuerdo con uno de los primeros experimentos de la afamada psicóloga estadounidense creadora de la teoría de la maleabilidad de memoria, Elizabeth Loftus, publicado en 1974, la memoria funciona como la Wikipedia: es una versión de la historia contada a través de las percepciones e influencias de varias personas. Además, está en constante cambio. 

El experimento de Loftus involucraba accidentes de tránsito. En su laboratorio, proyectaba videos exponiendo diferentes incidentes y posteriormente le preguntaba a la gente qué recordaba acerca del suceso. Sorprendentemente, las respuestas dependían bastante de cómo formulara su pregunta. 

Si preguntaba, por ejemplo ¿qué tan rápido iban los autos cuando se estrellaron? la gente calculaba, en promedio, que los autos iban 10 kilómetros por hora más rápido que cuando sustituía la palabra estrellar por chocar.

Luego, una semana después del experimento, las personas a las que se les había hecho la pregunta utilizando con la palabra “estrellar”, recordaban haber visto vidrios rotos, aunque en la cinta no había ninguno. 

¿Mencioné que el estudio de Loftus no implicaba cannabis?

Metodología

Volviendo al estudio actual, ¿cómo podría el cannabis afectar la susceptibilidad para crear recuerdos falsos? Para averiguarlo, Kloft y su equipo de los Países Bajos probaron los efectos de la intoxicación por THC en los recuerdos de 64 voluntarios sanos.

Los investigadores llevaron a cabo un ensayo doble ciego, aleatorizado y controlado con placebo en el que probaron los efectos de la intoxicación por THC en la susceptibilidad a la memoria falsa. Posteriormente, compararon los resultados con los de un grupo que recibió un placebo en lugar del cannabinoide.

El equipo evaluó los recuerdos de los participantes inmediatamente después de la intoxicación por THC o el uso del placebo, y una semana después, utilizó listas de palabras asociativas y dos tareas de información errónea.

En la primera tarea, los participantes observaron 15 listas de palabras relacionadas. Las personas que habían recibido THC tenían más probabilidades de decir que reconocían palabras que, de hecho, no se habían mostrado previamente, en comparación con las personas que recibieron el placebo.

Asimismo, en las tareas de desinformación, los científicos utilizaron la realidad virtual para crear la experiencia de una pelea en una estación de tren y el robo de un bolso en un bar.

En el primer escenario, los participantes fueron los testigos oculares, y en el segundo, fueron los perpetradores. Después de ver cada escenario, los participantes tuvieron que responder preguntas sobre lo que había sucedido.

Durante estas entrevistas, los investigadores introdujeron información inexacta al presentar el testimonio de un segundo testigo o empleando preguntas sugestivas y engañosas.

¿La intoxicación por THC aumenta el riesgo de informes falsos?

Los hallazgos del equipo revelaron que el grupo que consumió THC era mucho más propenso a formar recuerdos falsos que el grupo de placebo.

Además, cuando los experimentos se repitieron 1 semana después de la intoxicación por THC, cuando el grupo estaba sobrio, tenían la misma susceptibilidad a formar recuerdos falsos. En el estudio, los investigadores concluyen: 

“El cannabis parece aumentar la propensión a la falsa memoria, con una disminución de la fuerza de asociación entre un evento y un elemento de prueba, según lo evaluado por diferentes paradigmas de falsa memoria. 

“Nuestros hallazgos tienen implicaciones sobre cómo y cuándo la policía debería entrevistar a sospechosos y testigos”.

Además, Kloft y sus colegas agregan:

“En términos de entrevistar a testigos, víctimas o sospechosos después de la incidencia de un delito, esto significa que las entrevistas mientras el individuo todavía está intoxicado deben minimizarse, debido al alto riesgo de informes falsos.

¿Entonces?

Considerando la teoría de la maleabilidad de memoria, donde nuestros recuerdos pueden ser moldeados por elementos ambientales, situaciones y percepciones, la hipótesis de este estudio deja más dudas que respuestas. Sin embargo, no por eso hay que ignorar las investigaciones que abordan los riesgos de consumir marihuana. Una buena educación y divulgación cannábica debe abarcar tanto las virtudes como los peligros de la hierba.

Por supuesto, el cannabis afecta las percepciones cognitivas, pero la deformación de los recuerdos es algo común incluso entre los no consumidores de marihuana… Después de todo, la memoria y el cerebro son engañosos y a todos nos llegan a jugar malas pasadas… Por cierto, “¿dónde dejé mis llaves, sobre la mesa o dentro del auto?, ¿cuándo fue la última vez que las vi?” 

“Quien esté libre de pecado, que tire la primera piedra”.

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Fuentes: pnas, medicalnewstoday, diosaverde, uci, menteasombrosa.

Fuente de imagen: generationvoyage.