Legalización de la marihuana en México: ¿Será factible?

Por DiosaVerde.org

  • La Secretaría de Turismo mexicana propone que destinos turísticos como Cancún y Baja California Sur deberían legalizar la marihuana.

Enero de 2018. El principal funcionario de turismo en México dijo en una conferencia de prensa, que legalizar la marihuana ayudaría a combatir la epidemia de violencia que ha afectado diversas partes del país.

“Es absurdo que no hayamos dado ese paso”, mencionó el secretario de Turismo, Enrique de la Madrid. Agregó que la legalización del cannabis debería comenzar en Baja California Sur, un estado con puntos calientes como Los Cabos, y Quintana Roo, donde se encuentra Cancún. Ambas regiones vieron picos de violencia el año pasado.

Los comentarios fueron controversiales en los medios mexicanos. No sólo inesperados, sino que también se pronunciaron seis meses antes de una elección presidencial en la que se debate cómo proceder ante una guerra antidrogas respaldada por Estados Unidos, que ha contribuido a la mayor tasa de homicidios registrada en México. “Esta es la primera vez que escuchamos a un funcionario de alto rango en el cargo reconocer que la prohibición engendra violencia”, dijo Alejandro Madrazo, profesor en el programa de política de drogas del Centro de Investigación y Enseñanza de Economía en la Ciudad de México. “No deberíamos decir, ‘¿qué fumó la Secretaría?’ Deberíamos tomarlo en serio “, comentó el secretario de Turismo, De la Madrid, luego de afirmar que la idea transmitida en la conferencia era suya, al twitear:

“Quiero enfatizar que mi opinión sobre la legalización de la marihuana es un reflejo personal, basada en el análisis y estudio del tema para muchos años. Estoy convencido que debemos debatirlo, como parte de la solución a la violencia e inseguridad en México”.

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La idea de legalizar la marihuana en México no es nueva. El ex presidente mexicano Vicente Fox pidió la despenalización de la droga cuando dejó el cargo. La propuesta no fue a ninguna parte. Recientemente, en 2016, el presidente Enrique Peña Nieto propuso un proyecto de ley que permitiera a los mexicanos llevar hasta una onza de marihuana, argumentando que no tenía sentido que Estados Unidos y México siguieran políticas de drogas muy diferentes. La legislación se estancó en el Congreso.

La marihuana recreativa sigue siendo ilegal en México en gran medida: el país despenalizó la posesión personal de pequeñas cantidades en 2009, pero los procesados por vender o contrabandear, enfrentan fuertes sanciones.

En 2015, la Suprema Corte de Justicia de México, decidió permitir a las personas cultivar marihuana para uso personal, aunque la resolución sólo se aplicó técnicamente a cuatro demandantes en el caso. En junio de 2017, México legalizó la marihuana para fines médicos y científicos.

 Las encuestas revelan que la mayoría de los mexicanos desconfían en cuanto a legalizar la marihuana, pero su oposición parece estar suavizándose. Una encuesta realizada en abril de 2017 por el grupo sin fines de lucro México Unido contra la Delincuencia (MUCD), y la encuestadora Mitofsky, encontraron que 56 por ciento de los encuestados mexicanos se oponía a la legalización. Eso es menos de 77 por ciento revelado en una encuesta anterior por Mitofsky en 2010.

Uno de los cambios principales más importantes se produjo en los años intermedios: las posturas cambiantes de los Estados Unidos sobre el cannabis.

Lo más significativo para México fue que la vecina California legalizara la venta de marihuana recreativa en enero. Según las firmas de investigación BDS Analytics y Arcview Market Research, se espera que el mercado en ese estado obtenga 5.1 mmdd en 2019. 

David Shirk, analista de seguridad de México y profesor de la Universidad de San Diego, expresó:

“Colorado, California y los otros estados que legalizaron la marihuana, de alguna manera pusieron a Estados Unidos en una posición realmente incómoda. Por un lado, le estamos diciendo a nuestros amigos como México que queremos que tengan una política de tolerancia cero con las drogas ilícitas, mientras que al mismo tiempo hemos dejado la nariz del camello debajo de la carpa cuando se trata de marihuana”.

México y Estados Unidos, ambos signatarios de los tratados antinarcóticos de las Naciones Unidas, han cooperado durante décadas en la búsqueda de drogas y esfuerzos de erradicación de la marihuana:

“Existe una contradicción significativa en la política actual de Estados Unidos, que México y otros países comenzarán a utilizar como base para modificar sus propias políticas de drogas”, dijo Shirk.

Si bien México tiene pocas probabilidades de que legalice la marihuana en el futuro cercano, ¿quién hubiera imaginado hace 10 años que hoy uno podría ir a un dispensario de marihuana en nueve estados de Estados Unidos y salir con cepas legalmente desarrolladas como Granddaddy Purple, Bubba Kush o Super Silver Haze?

¿La legalización frenaría la delincuencia?

 Referente a la cuestión de si la legalización de la marihuana en México reduciría la violencia, es tema de debate. Las estimaciones varían ampliamente sobre las ganancias del cártel de drogas y el golpe potencial planteado por la legalización.

 Un informe de 2010, elaborado por la Corporación RAND, en Washington, D.C., señaló que legalizar la marihuana en California reduciría las ganancias del cártel mexicano apenas 2-4 por ciento. Por otro lado, un estudio de 2012, realizado por el Instituto Mexicano para la Competitividad, concluyó que los cárteles podrían perder entre 22 y 30 por ciento de sus ingresos en tres estados del oeste: Colorado, Oregón y Washington, donde legalizaron la marihuana.

Los cárteles todavía introducen marihuana de contrabando en Estados Unidos, pero ahora ha habido una tendencia inversa: los funcionarios que se apoderan de hierbas de alta calidad, se dirigen hacia el sur, en la frontera Estados Unidos-México. Además, los traficantes mexicanos han cambiado su enfoque a la heroína y metanfetamina. La competencia por esos lucrativos mercados en Estados Unidos ha ayudado a aumentar la violencia en México.

También hay otros factores en juego. Han surgido nuevas bandas criminales, lo que ha llevado a los ciudadanos a formar milicias para defenderse. Sus batallas se han convertido en una importante fuente de violencia en México en los últimos años.

Sin embargo, los analistas de seguridad creen que la mayor parte de la violencia es resultado de la estrategia de México para derrotar a los principales jefes del narco, dejando vacíos de poder y batallas feroces para llenarlos. Eso ha sido especialmente evidente luego de la extradición de México del líder del cártel de Sinaloa, Joaquín El Chapo Guzmán, a Estados Unidos, en enero de 2017.

Legalizar el cannabis en México probablemente tendría un doble efecto, dijo Shirk: podría llevar a un crecimiento aún mayor en los mercados de heroína y metanfetamina, lo que provocaría aún más violencia. Pero también podría liberar a las fuerzas del orden público mexicanas para que se centren en combatir las drogas más duras, así como en prevenir y resolver crímenes violentos.

En este sentido, Madrazo comentó:

“Los abrumadores recursos del Estado procesarán a hombres pobres, sin educación, de piel oscura que poseen marihuana. Al restar importancia a su criminalización, liberarían importantes recursos del gobierno que podrían usarse para procesar delitos graves como el homicidio y el secuestro”.

Sin embargo, Alejandro Hope, un analista de seguridad de México, dijo que los recursos policiales ya han sido redirigidos lejos de los delitos de marihuana:

“Hay muchas razones para la legalización: eliminar una fuente de extorsión y eliminar la corrupción policial. Pero reducir los homicidios probablemente no sea tan grande”.

Si bien el impulso para legalizar la marihuana puede tardar años en materializarse, o nunca consolidarse, los comentarios de la Secretaría de Turismo tuvieron un impacto inmediato y de manera importante en México, pues fueron emitidos en el auge de la carrera por las elecciones presidenciales de julio.

Inmediatamente se convirtió en un tema de debate, y se preguntó a todos los principales candidatos presidenciales si apoyaban o no la legalización. Hasta ahora, ninguno ha demostrado una postura sólida, incluido el izquierdista Andrés Manuel López Obrador, quien lideraba las encuestas.

Lisa Sánchez, directora de México Unido contra la Delincuencia, y quien apoya la legalización de la marihuana, dijo que encontró el momento de los comentarios de De la Madrid “turbio”, dado el contexto político. Aun así, ella no protestó en contra:

“El ministro está brindando al público en general los argumentos correctos. El debate público sobre esto va a suceder más temprano que tarde”.

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Referencias: NPR, El País, New York Times, MUCD, Arcview Market Research, The Washington Post, Insight Crime.