Investigadores descubren que algunos productos con CBD para mascotas no contienen suficiente cannabidiol
Por DiosaVerde.org
El mercado de CBD se ha expandido notablemente y ha alcanzado el mercado de mascotas, acompañado de brillantes testimonios de clientes que afirman que el derivado del cannabis ayuda a que perros y gatos estén más tranquilos y sin dolor.
También te puede interesar:
- ¿Puede drogarse tu mascota con el humo de segunda mano?
- Cannabis y mascotas, un gigantesco mercado potencial: veterinarios y propietarios dicen que sí funciona
- Así es como el CBD podría ayudar a tu perro
Sin embargo, algunos de estos productos no parecen ser lo que los compradores esperamos.
Joseph Wakshlag, quien es investigador veterinario de la Universidad de Cornell y estudia los usos terapéuticos del compuesto, declaró para Hightimes:
“Te sorprenderá el análisis que hemos visto de productos en el estante sin prácticamente CBD, O productos con 2 miligramos por mililitro, cuando una concentración efectiva sería entre 25 y 75 miligramos por mililitro. Hay muchas personas que buscan ganar un dólar en lugar de producir algo que sea realmente beneficioso”.
Dichos productos pueden llegar a los estantes debido a que el Gobierno Federal aún no ha establecido normas para el CBD que podrían ayudar a las personas a saber si funciona para sus mascotas y en qué dosis y proporciones.
Aun así, hay muchas historias de éxito individuales que han ayudado a impulsar este mercado, el cual, según la firma de investigación de cannabis Brightfield Group, es de 400 mdd, ha crecido más de 10 veces desde el año pasado y se espera que alcance los 1.7 mmdd para 2023.
Algunos dueños de mascotas descubren que el CBD no funcionaba
Según Hightimes, Dawn Thiele, contadora en Oak Creek, Wisconsin, dijo que compró una botella de aceite de CBD de 53 dólares en una tienda local con la esperanza de calmar a su Yorkshire terrier de dos años durante sus largos viajes en auto.
“No vi un cambio en su comportamiento”, dijo Thiele. Sin embargo, sigue siendo una creyente.
“El producto es bueno, simplemente no funcionó para mi perro”, dijo.
El CBD es un cannabinoide no psicoactivo que se encuentra en el cáñamo y la marihuana. Ambas son plantas de cannabis, pero solo la marihuana tiene suficiente THC para provocar euforia. Por lo tanto, la gran mayoría de los productos de CBD provienen del cáñamo, que tiene menos de 0.3 por ciento de THC.
El CBD ha cosechado seguidores devotos entre personas que juran que sirve para todo, desde la reducción del estrés hasta para mejorar el sueño. La aprobación de la Ley Agrícola 2018, que legalizó el cultivo y el transporte de cáñamo, desató una estampida de compañías que lanzaron productos al mercado sin las regulaciones adecuadas que garanticen seguridad, calidad y eficacia.
Los productos para las personas fueron seguidos rápidamente por CBD masticables, aceites y aerosoles para mascotas.
Bill Bookout, presidente del National Animal Supplement Council, un grupo de la industria cuyas empresas miembros aceptan los requisitos de pruebas y recopilación de datos, afirmó:
“El crecimiento es más rápido de lo que he visto para cualquier producto en 20 años en este negocio. Hay una fiebre del oro en curso ahora. Probablemente 95 por ciento de los participantes de la industria son responsables, pero lo peligroso es el operativo nocturno que quiere sacar provecho “.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos está desarrollando regulaciones para comercializar productos de CBD, para mascotas y personas. Este año, ha enviado cartas de advertencia a 22 empresas citando violaciones como hacer reclamos sobre usos terapéuticos y tratamiento de enfermedades en humanos o animales o comercializar CBD como un suplemento dietético o ingrediente alimentario.
“Realmente es como el Salvaje Oeste”, comenta David Moche, fundador de Applied Basic Science, una compañía formada para apoyar la investigación de CBD veterinaria de la Universidad Estatal de Colorado y quien ahora vende CBD en línea. Moche aconseja a los consumidores buscar un certificado de análisis de un laboratorio de pruebas de terceros para asegurarse de que obtienen lo que pagan.
Wakshlag además, agrega, que los productos deben ser probados no solo para determinar el nivel de CBD, sino también para asegurarse de que estén libres de contaminantes tóxicos como metales pesados y pesticidas y que solo tengan pequeñas cantidades de THC, que en niveles más altos es muy tóxico para los perros.
La documentación científica de la seguridad y eficacia del CBD en mascotas es casi inexistente
A pesar del escepticismo por parte de las autoridades y algunos veterinarios, la opinión general ha empezado a cambiar, pues hay evidencia, aunque poca, que respalda el potencial del CBD para tratar mascotas.
Un pequeño ensayo clínico, realizado en la Universidad Estatal de Colorado, y publicado en el Journal of the American Veterinary Medical Association, en junio, reveló que el aceite de CBD redujo la frecuencia de las convulsiones en 89 por ciento de los perros epilépticos que lo recibieron. Otro estudio clínico, dirigido por Wakshlag en Cornell, publicado en Frontiers in Veterinary Science, en julio de 2018, encontró que el aceite de CBD ayudó a aumentar la comodidad y la actividad en perros con osteoartritis.
También te puede interesar:
- Activistas en Nuevo México buscan expandir el programa de cannabis medicinal para incluir perros
- Nymous, el albergue canadiense donde han curado animales con CBD
- Cómo evitar que roedores, pájaros y otros animales devoren tu cultivo exterior de marihuana
Si te sirvió esta información, comparte tu experiencia con nosotros en redes sociales. Si prefieres permanecer anónimo, escríbenos un correo electrónico, aquí queremos escucharte.
Colabora con nosotros. Envíanos tus artículos haciendo clic aquí.
Fuentes: nytimes, hightimes, diosaverde, phys, frontiersin.
Fuentes de imagen: dvm360, elblogcannabico.