Investigación reciente: El cannabis podría ayudar a prevenir la violencia doméstica
Por DiosaVerde.org
No es sorprendente que se asocie el abuso del alcohol y otras sustancias con el aumento de la violencia doméstica. Sin embargo, el cannabis puede ser catalogado como una excepción, completamente fuera de esta categoría. Incluso podría contradecir tal asociación. Un estudio reciente, sustentado en 12 años de investigación, indica una respuesta bastante concluyente.
Si alguien pudiera respondernos en relación a si puede o no la marihuana ayudar en la prevención de la violencia doméstica, serían sin duda los investigadores de las universidades de Yale, Buffalo y Rutgers, autores de un estudio publicado en Psychology of addictive behavior (Psicología del comportamiento adictivo) en 2014.
Curiosamente, la investigación demostró que las parejas que habitualmente fumaban marihuana, eran las que menos probabilidades tenían de participar en distintas modalidades de violencia doméstica.
La investigación
El análisis se llevó a cabo entre 1996 y 1999, luego de examinar a 634 parejas durante sus primeros nueve años de matrimonio ¿La meta principal?: investigar si la marihuana tuvo o no efectos en la violencia entre parejas.
Según el criterio de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), se define como violencia doméstica (IPV) toda “violencia física, violencia sexual, acoso y agresión psicológica (incluidos los actos coercitivos) por parte de una pareja íntima actual o anterior”. El estudio, sin embargo, lo clasifica como un acto de agresión física.
En el transcurso de nueve años, cada pareja examinada respondió una serie de encuestas enviadas por correo, donde les pidieron que informaran sobre cualquier violencia cometida por ellos o por su pareja para medir los efectos del consumo de cannabis en la IPV. Después del primer año, 37.1 por ciento de los esposos habían cometido un acto de IPV en una frecuencia promedio de cuatro veces al año.
Los esposos se vieron más obligados a admitir su consumo de marihuana. 28 por ciento de ellos admitió que fumaba marihuana, mientras que sólo 22.7 por ciento de las esposas admitieron su consumo de cannabis.
Por supuesto, a las parejas no se les preguntó exclusivamente sobre su consumo de cannabis, sino que fueron cuestionadas respecto a si habían participado consumiendo alcohol u otras drogas. Los investigadores observaron que la mayoría de los estudios sobre el uso de sustancias y la IPV se centraban en el alcohol y que se considera tanto un riesgo como una consecuencia de la IPV.
Resultados
Una vez transcurridos los nueve años, el estudio demostró numerosos resultados, concluyendo que el consumo de marihuana disminuía la violencia doméstica. Los hallazgos indicaron que “el uso habitual de la marihuana, generalmente predecía una IPV menos frecuente, tanto para hombres como para mujeres durante los primeros nueve años de matrimonio”.
No solamente llegaron a la conclusión de que la IPV disminuía cuando solo un compañero fumaba hierba. El estudio también encontró que el riesgo de violencia de pareja era más bajo cuando ambos compañeros fumaban marihuana.
Los investigadores continuaron describiendo que los usuarios crónicos exhiben “reacciones emocionales ‘embotadas’ a los estímulos de amenaza”. Básicamente, fumar cannabis disminuye el instinto de lucha o huida del individuo.
Según los investigadores, la marihuana es diferente a otras sustancias como el alcohol, porque reduce los conflictos y la agresión.
Por otro lado, el Washington Post, haciendo referencia un poco más específica al respecto, mencionó parte del mismo estudio, agregando que si bien los autores advierten que estos hallazgos son predictivos (que las parejas que fuman cannabis tienen menos probabilidades de cometer violencia doméstica), no necesariamente trazan una línea causal entre los dos comportamientos, pues entre las conexiones que plantean, “la marihuana puede aumentar el efecto positivo, lo que a su vez podría reducir la probabilidad de conflicto y agresión”.
Esto podría traducirse como que las personas consumidoras de marihuana son felices, y, por tanto, no pelean.
Dado que algunos datos extraídos por el estudio, tienen ya casi dos décadas, a los autores les gustaría ver si estos hallazgos serían verdaderos entre los recién casados actuales. Particularmente a la luz de “la tendencia hacia la despenalización de la marihuana en Estados Unidos”.
Actitudes hacia su uso
Los autores destacaron la importancia de realizar más investigaciones, sobre todo que aborden otras dimensiones referentes al uso de la marihuana, tales como el abuso, dependencia y abstinencia. Todos los estados de comportamiento que pueden tener diferentes efectos en la forma en que los cónyuges interactúan entre sí.
No obstante, el documento es una contribución sólida a la literatura sobre la marihuana, y necesitaremos muchos más, ya que el país parece avanzar hacia la legalización general. De hecho, la DEA aumentó significativamente la cuota de producción de marihuana del Gobierno Federal este año, con el fin de proporcionar la materia prima para una mayor investigación sobre el uso del cannabis.
Entonces… ¿Puede el cannabis ayudar a prevenir la violencia doméstica?
Obviamente, la marihuana no tiene el poder de suprimir algo tan oscuro como el abuso. La violencia doméstica es el resultado de que una pareja sienta la necesidad de controlar y dominar excesivamente a su pareja. Aquellos que son testigos de este tipo de violencia pueden ser más propensos a aprender y usarlo en el futuro.
Por ahora, levanta el ánimo con tu pareja y disfruta de la relajación que proporciona la marihuana. Asegúrate de comunicarse con tu pareja para entender con qué se sienten cómodos. Es importante ser abierto y mantener un respeto mutuo.
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Referencias: psycnet.apa.org, CDC, High Times, The Washington Post.