6 situaciones que debes evitar para no ser arrestado en Canadá por delitos de marihuana

Por DiosaVerde.org

Aunque el cannabis es legal a nivel nacional en el Gigante Blanco del Norte, aún sigue siendo uno de los productos más estrictamente controlados. A continuación te decimos cómo podrías meterte en serios problemas con las autoridades canadienses, e incluso conocer sus prisiones.

1.- Trasladar la marihuana de nuevo a la frontera

Así como la marihuana recreativa es legal en Canadá, también lo es en Alaska, Estados Unidos. La frontera que divide ambas naciones, de 2,475 km de largo, también es la frontera más larga del mundo entre dos jurisdicciones que respaldan el consumo de cannabis. Sin embargo, los guardias fronterizos de ambos lados te atraparán con entusiasmo si intentas cruzar con una bolsa de cannabis. En el lado de Alaska, esto se debe a que el Gobierno Federal estadounidense aún le frunce el ceño al cannabis ―y ellos son los que están a cargo de las fronteras―. En el lado canadiense, podrían detenerte para asegurar que el mercado legal no se diluya con la marihuana importada no controlada. Según el Código Penal, por contrabando de marihuana en Canadá aún puedes obtener una condena hasta de 14 años en prisión.

2.- Tener demasiada hierba

Canadá no tiene límites de posesión de licor. Si deseas comprar un refugio contra incendios fuera de servicio y convertirlo en la bodega de vinos más grande de la historia, no tendrás problemas. De hecho, una regla similar es válida para las armas de fuego: siempre que tengas licencia, técnicamente no existe un límite que te impida comprar suficientes rifles como para armar una guerrilla. Sin embargo, el cannabis es otra cosa y sigue siendo uno de los pocos productos legales en los que el gobierno se ha reservado el derecho de decidir cuánto se te permite poseer ―al menos en público―. En general, a las autoridades provinciales no les importa cuánto mantengas en la casa, pero si sales a la calle y eres sorprendido con más de 30 gramos de cannabis seco o 150 gramos de marihuana fresca, la multa federal puede ser desde una infracción, hasta cinco años de cárcel.

3.- Dejarte atrapar con marihuana en ciertas comunidades indígenas

Ciertas comunidades indígenas, en particular las del norte canadiense, mantienen estrictas políticas “secas” en las que se restringe la posesión de alcohol y los Mounties ―policía montada―, se encargan gustosamente de detener a cerveceros caseros y contrabandistas. Por supuesto, a diferencia del cannabis, la capacidad de una comunidad para prohibir el alcohol se menciona explícitamente en la Ley Indígena (Indian Act.). No obstante, los términos que determinan la legalidad del cannabis no son  todavía claros. Lo que sí es claro es que el Gobierno Federal ha anunciado que no anulara ninguna prohibición indígena.

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4.- Venderle cannabis a un menor

Si te atrapan vendiéndole cigarrillos a un menor de 18 años recibirás una multa que oscila entre 100 y 5 mil dólares canadienses, dependiendo de la provincia en la que te encuentres. Pero si le vendes porros, podrías terminar con un historial criminal. La Ley Federal contempla una pena de hasta 14 años de cárcel por venderle cannabis a un menor, con la misma pena por “usar a un joven para cometer un delito relacionado con el cannabis”. De algún modo, esto podría incluir, por ejemplo, contratar a un joven de 16 años en un servicio de entrega de weed.

5.- Cultivar demasiada hierba

En este punto existe una extraña zona gris de legalidad con respecto al cannabis. Por un lado, actualmente es perfectamente permitido que cultives marihuana en tu huerta de verduras. Sin embargo, si cultivas demasiadas plantas, podrías ser encarcelado por más tiempo que la mayoría de los asesinos. Bajo los límites federales, un jardín de macetas personal puede tener un máximo de cuatro plantas, pero si te dejas atrapar con un cultivo sin licencia en el que se cultivan cientos de plantas, las sanciones podrían ser tan malas como en los viejos tiempos.

6.- Ser coreano

Varios países asiáticos reaccionaron ante la legalización del cannabis canadiense con una serie de advertencias a sus ciudadanos, argumentando que la hierba legal de Canadá podría pudrir el cerebro o algo así. “Los residentes y viajeros japoneses deben tener mucho cuidado de mantenerse alejados de la marihuana, incluidos los alimentos y las bebidas que la incluyen”, escribió el consulado de Vancouver en Japón en una advertencia. Pero solo Corea del Sur ha prometido imponer a sus ciudadanos cargos por drogas. De hecho, el país asiático celebró sesiones informativas en Canadá y a través de un sitio web del gobierno y transmisiones de televisión para advertir sobre el rigor de la ley a sus ciudadanos:

“Incluso en un lugar donde la marihuana está legalizada, si nuestros ciudadanos fuman, compran, poseen o entregan marihuana, es un acto criminal, por lo que serán castigados”, La embajada en Canadá escribió: “Por favor tenga cuidado”.

Teniendo en cuenta que los soldados canadienses fumaron mucha hierba mientras liberaban con éxito a Corea del comunismo, durante la década de 1950, uno pensaría que serían un poco más comprensivos.

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Fuentes: The Grow Thop The Grow Thop National Post Department of Justice Canada